El Estrecho de Ormuz
permite el tránsito del 35% del petróleo en el mundo.
Las potencias
occidentales y varios de sus aliados de Medio Oriente han desplegado una enorme
flota naval en el Golfo Pérsico, en tan solo pocos días después que el primer
ministro israelí Benjamin Netanyahu,
volvió a sugerir que su país pronto podría lanzar un ataque preventivo contra
las instalaciones nucleares de Irán.
La flota incluye
buques procedentes de 25 países, se encuentran tres grupos completos de
transporte de Estados Unidos, cada uno con una dotación de aviones de la fuerza
aérea mayor que la que tiene Irán.
Los funcionarios
militares citados por el diario de Londres, el Daily Telegraph dicen que la
acumulación es parte de un ejercicio anual nuevo, pero no es un secreto sobre
el hecho de que el “enemigo” es Irán.
Entre las potencias
de occidentales existe un gran temor porque si Israel ataca el desafiante
programa nuclear de Irán, la República Islámica, tomará represalias para tratar
de cerrar el Estrecho de Ormuz, un
estrecho canal en el Golfo Pérsico, que permite el tránsito diario de cerca del
35 por ciento (35%) del petróleo comercializado en el mundo.
Para los que
aprovechan el petróleo, un bloqueo del
Estrecho de Ormuz tendría consecuencias potencialmente catastróficas para
la economía de los EE.UU., Gran Bretaña, la Zona Euro y Japón, entre otros.
También existe una
gran preocupación de que Israel esté planeando atacar a Irán antes de las
elecciones presidenciales en EE.UU. a realizarse en noviembre, con el fin de
obligar al presidente Barack Obama a apoyar el esfuerzo militar. Obama
probablemente perdería una gran cantidad de votos del público proisraelí
estadounidense si no brinda la ayuda, y Jerusalén está preocupado porque puede
esperarse que después de las elecciones, si Obama gana, él estará menos
inclinado a prestar asistencia a Israel.
Obama y
otros líderes occidentales siguen insistiendo en que hay esperanza para una
solución diplomática, a pesar de los recientes informes de la Agencia
Internacional de Energía Atómica (OIEA) y los últimos 10 años de esfuerzos
diplomáticos que sólo han servido para acelerar el programa nuclear de Irán.
“El mundo le dice a
Israel: espera, aún hay tiempo”. Y yo digo, “¿Esperar qué? ¿Espere hasta
cuándo?” dijo Netanyahu la semana pasada. “Los que están en la comunidad
internacional se niegan a poner líneas rojas a Irán que no tiene el derecho
moral de poner una luz roja delante de Israel”.
Fuente: NoticiaCristiana.com
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